Pese a no haber jugado ni un minuto en la primera fecha de la actual temporada del torneo italiano, en la victoria 3-0 sobre el Udinese, el ex Manchester United fue sometido al control antidoping donde le encontraron rastros de testosterona en su cuerpo el pasado 20 de agosto.

Ahora, el internacional galo tiene tres días para solicitar una contraprueba y evadir las medidas que prepara el Tribunal Nacional Antidopaje que ya anunció la suspensión cautelar que habla de la supuesta violación de los códigos 2.1 y 2.1 de las «Normas Deportivas Antidopaje» que sanciona el uso e incluso el intento de consumo de sustancias prohibidas.

La inhabilitación por dopaje podría llegar a los dos años, que se podrían ampliar a cuatro si se demuestra que Paul Pogba tenía la intención de sacar ventaja deportiva.

El mediocampista de 30 años solo disputó 52 minutos en esta nueva temporada después de una larga lesión. Algunos minutos ante el Bologna y otros contra el Empoli, siempre ingresando en el segundo tiempo.