La producción del reality show internacional finalizará en las próximas semanas en Buenos Aires, cuando Darío Barassi y Wanda Nara regresen al país con los participantes que aceptaron la propuesta de matrimonio.

Este reality se adentrará en la vida de 16 hombres y 16 mujeres que buscarán conocerse sin verse, los participantes tendrán citas románticas en cabinas y estarán con los ojos vendados. Durante estos encuentros, los 32 elegidos deberán elegir, o no, a su pareja solo por la química que sienten al compartir un momento y, si así lo quieren, podrán proponerse matrimonio.

Las parejas que se formen podrán disfrutar de paseos románticos en las playas de Tulum, en México y luego regresaran a Buenos Aires para poner a prueba la relación con la convivencia y, si sobreviven a ella, dar el sí en el altar.

“¡Qué loco esto de hablar sin vernos!”, dice Wanda en los avances actuando como participante del reality. “Calculo que hay que conocernos… ¿querés arrancar?”, responde Barassi. “Me llamo Wanda, soy emprendedora, manager, creadora de contenido, actriz, cantante, modelo, conductora…”, empieza la esposa de Mauro Icardi y el conductor la frena: “No te quedó ningún título, Wanda, qué cargadito el cv… Mejor seguí vos porque lo mío es un poco más tranqui”.

“Tengo cinco hijos, cuatro casas, un campo, cinco perros, diez caballos y casi 20 millones de seguidores en Instagram. Básicamente, soy una bad bitch… ¿Vos qué onda?”, continuó la conductora y Barassi inició su presentación con el humor que lo caracteriza: “Yo soy Darío, Darío Tadeo Pacheco Barassi, más conocido como Fideo. Soy atlético: yo me levanto, burpee, voy al baño, burpee”.

“Soy muy viajado, el tramo San Juan – Buenos Aires lo debo haber hecho unas 90 veces en mi vida. Sé dónde se compra el mejor salame, el mejor sánguche de mortadela, es una ruta que cuando quieras, vamos”, continuó y, siguiendo la lógica del programa, le propuso a Wanda: “Wanda, ¿querés conducir Love Is Blind Argentina conmigo?”. Sin dudarlo la modelo respondió “si, acepto” emocionando a Barassi. “Vamos, es un sí, es un sí”, festejó el sanjuanino.