Con dirección de Marçal Forès, la española Clara Galle se puso en la piel de Raquel, una joven que está enamorada de su vecino, Ares -interpretado por Julio Peña-, un chico al que le sigue todos los movimientos de las sombras. Para él, se siente invisible, motivo por el que se propone conquistarlo a todo costa, aunque para impresionarlo tenga que meterse en problemas.

El amor entre los protagonistas se ve atravesado por el erotismo, motivo por el que los actores debieron prepararse para causar el impacto esperado en la pantalla. «La figura de la ‘coach’ de escenas intimas, en este caso Miriam, es una figura que pensamos que es muy necesaria hoy en día para todas las producciones, para que haya un especial cuidado y respeto en esas escenas que pueden dar miedo al principio, sirve para quitarle esa importancia, de pensar que es un desnudo, que sexo y verlo como una escena más y trabajarlo desde el lado más profesional que se pueda», detalló Peña en una entrevista.

Por su parte, su compañera, que está dando sus primeros pasos como actriz, asegura ser consciente de las repercusiones que tendrá esta película. «Estoy viendo cómo es realmente de grande la cosa, que se empieza a ser material. Un poco de miedo sí que tengo, porque soy una persona muy libre, independiente y tengo como que mi sitio en mi burbuja y en mi mundo, y aunque estoy muy agradecida con todo, con los fans y tal, yo no quiero perder mi vida», reveló. Lo cierto es que como se trata de una trilogía, la historia recién empieza y todo indicaría que la segunda y tercera parte también tendrán su película.