Luego de que la vicepresidenta Cristina Kirchner rechazara la posibilidad de afrontar una candidatura electoral en 2023, lo que descolocó a los integrantes del Frente de Todos y generó tensiones internas, el presidente Alberto Fernández buscará tener «un rol protagónico» dentro de la estrategia que adoptará la coalición gobernante.
Con Cristina Kirchner autoexcluida de la contienda electoral de 2023, Alberto Fernández buscará tener «un rol protagónico»
«Alberto nunca se bajó de la competencia por un segundo mandato. Él tiene que ocupar un rol protagónico en la campaña del año que viene. Lo lógico, lo natural, en el peronismo es que un Presidente busque su reelección», razonaron ante NA desde el entorno del jefe de Estado.
La idea de que Fernández compita para obtener su reelección comenzó a tomar fuerza en un sector del oficialismo tras el «desorden interno» que generó la titular del Senado al afirmar que no estará «en ninguna boleta» en el 2023.
La determinación de Cristina Kirchner, quien lo comunicó a los minutos de conocerse el fallo que la condenó a seis años de prisión e inhabilitación perpetua a ejercer cargos públicos, generó un cimbronazo en el interior del oficialismo que ya no podrá cerrar filas tras la figura de la exmandataria.
Al respecto, en la mesa chica del Presidente reconocieron que era una posibilidad que estaba latente porque había sido anticipado por el diputado Máximo Kirchner y vieron la decisión de la Vicepresidenta con buenos ojos. «Cristina tiene un nucleó duro de imagen que no le permitiría ganar un ballotage. Le pasó en 2019 y le pasa ahora», argumentaron.
En medio de lo que definieron como «el inicio de la tormenta» que deberá superar el Frente de Todos para llegar a la elección del año próximo «unidos y competitivos», desde el albertismo confiaron que «al final del camino la estrategia se va a acomodar y se llegará a una fórmula consensuada».
Si bien en la Casa Rosada afirmaron que Alberto Fernández es «un candidato natural» para encabezar la lista del Frente de Todos en 2023, dado que «es lógico que si un Presidente considera que su gestión es buena vaya por la reelección», en el ala dura del kirchnerismo no están de acuerdo con ese razonamiento.
«Esto no es una especie de monarquía en la que hay alguien ‘natural’ para un determinado espacio», apuntaron desde el kirchnerismo en respuesta al planteo que realizaron desde la Casa de Gobierno.
Más allá de las críticas en «off the récord», la diputada camporista Paula Penacca recogió el guante a través de sus redes sociales: «Cristina no va a ser candidata por la persecución, el hostigamiento y la proscripción a la que la sometió la mafia judicial y mediática. En la Casa Rosada parece que lo festejan porque aumenta las chances electorales de Alberto».
Lo cierto es que el fuego cruzado comenzó a incrementarse en los últimos días, dado que en un sector del Frente de Todos aún tenían «la esperanza» de que Cristina Kirchner fuera candidata a Presidenta en 2023 para «ordenar lo que Alberto Fernández no supo cómo hacerlo».