El Gobierno nacional toma distancia de la tensión abierta en el PRO, que discute puertas adentro el rol que deberían ocupar frente a la administración libertaria, y ensaya una nueva propuesta: consolidar un interbloque legislativo, aunque aclaran que “no es una necesidad, es un deseo”.
El Gobierno evita tomar postura en la interna del PRO y define su relación con Macri
En Casa Rosada minimizan los últimos pasos del expresidente Mauricio Macri y consideran que la tensión abierta entre Macri y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich -más alineada al presidente Javier Milei- solo beneficia a La Libertad Avanza (LLA) que se consolida en pleno armado y en la conquista del sello legal.
Plagados de optimismo, los libertarios aseguran que no necesitan de nadie por lo que, ante los dardos de un sector de los últimos aliados, no habrá respuesta. Para algunos, “el PRO no le marca agenda a nadie” y de mantenerse en ese rol, paulatinamente el espacio dejará de existir.
Ante esa panorama, la posibilidad de sumar a todos los “del centro a la derecha” que se quieran sumar a las filas libertarias está abierta.
“Vamos a ir profundizando la relación con el PRO y Mauricio (Macri) se va a seguir equivocando”, vaticinan desde el círculo rojo de Milei luego de que el exPresidente se opusiera de forma tajante a la fusión entre el PRO y LLA. Hay quienes creen que quedó disconforme luego de que desde el 10 de diciembre, sus aspiraciones desentonaran con las ideas que el propio Milei tenía para el espacio aliado.
Según explican, a Macri no le interesan los referentes propios sino los cargos a ocupar, por eso, mostró extrema simpatía por la AFIP, ADUANA, ANSES, la Inspección General de Justicia (IGJ), AYSA, entre otras carteras estratégicas con una fuerte caja.
El motivo detrás del reclamo por la coparticipación
A pesar de las quejas de la Ciudad, en las que el propio Mauricio Macri tomó parte, por los pasillos de Balcarce 50 aseguran que el ministro de Economía, Luis Caputo, informó en persona al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, que no saldará la deuda de Nación con la ciudad por la coparticipación a pesar del fallo judicial. “Hace algunos meses Jorge y Toto hicieron un acuerdo, quizá Mauricio no estaba al tanto”, plantearon al respecto.
Con el alcalde en conocimiento, atribuyen a una estrategia del mayor de los Macri la presión desde las arcas porteñas de las últimas horas. “Estará rompiendo el acuerdo. Divide y reinarás”, definieron ante su insistencia.
A pesar de la distancia, y luego de que el Presidente hablara de una fusión entre ambos partidos, se oferta la consolidación de un interbloque legislativo que, en los hechos, funciona como tal, pero que desde el oficialismo aspiran a institucionalizarlo no sin antes aclarar que se trata de una voluntad y no de una obligación. «No es una necesidad, es un deseo. Creemos que estamos listos para avanzar en este sentido”, aclaran desde las filas libertarias.
Para eso, desde hace semanas que se concretan reuniones bajo la promesa de que, si bien aún no hay fecha, tendrá lugar “más temprano que tarde”. Desde el PRO revelan que hay mucho por discutir para llegar a un acuerdo del estilo.