El Senado puso hoy en marcha el debate por la reforma de la Ley de Alquileres y desde Juntos por el Cambio reclamaron «acelerar» el tratamiento de la media sanción obtenida la semana pasada en la Cámara de Diputados a raíz de la incertidumbre que generó en el mercado el posible cambio del marco normativo.
El Senado puso en marcha el debate y Juntos por el Cambio reclamó «acelerar» el tratamiento
Sucede que tras la aprobación en la Cámara Baja de la reforma, que reduce de tres a dos años el plazo de los contratos y establece una indexación cuatrimestral sin atarse a indicadores fijos, muchos propietarios pusieron en pausa sus alquileres a la espera de cómo termine resolviéndose la nueva legislación en el Senado.
Esta coyuntura agravó la ya de por sí delicada situación de millones de inquilinos que ven reducida la oferta de inmuebles en alquiler, sumado a la disparada inflacionaria de los precios.
Si bien hay sectores de Juntos por el Cambio que ven con mejores ojos la derogación lisa y llana de la llamada «Ley Lipovetzky», se comprometieron a trabajar para darle sanción definitiva al proyecto venido en revisión de Diputados ya que se trata del camino más corto y posible en las actuales circunstancias.
El panorama es complejo para la principal bancada opositora pero tiene buenas chances de concretar su objetivo ya que para asegurarse la ley debe llegar a 37 votos, y ya tendría garantizados 35, sumando al rionegrino Alberto Weretilneck y a la cordobesa Alejandra Vigo.
El debate en comisiones
Al abrir la ronda de oradores en el plenario de las comisiones de Legislación General y Presupuesto y Hacienda, el senador chaqueño Víctor Zimmermann (UCR) resaltó la necesidad de los inquilinos y propietarios de darle «celeridad» al proceso de tratamiento en la Cámara alta.
«Es imprescindible que podamos avanzar lo antes posible y en un tiempo prudencial podamos sancionar esta ley», instó el opositor.
Si bien valoró que existen otros proyectos a la vista de parte de senadores de Juntos por el Cambio, Zimmerman evaluó que «ante esta situación que vive el país necesitamos sacar un dictamen lo antes posible y sancionar esta media sanción que viene de Diputados».
«Todos sabemos que no es la mejor ley, pero en el marco de lo que nos preocupa a todos tenemos que darle celeridad, ver si podemos sacar este dictamen y dar una solución posible», insistió.
Por el oficialismo, Juliana Di Tullio (Unidad Ciudadana) coincidió en que es importante «acelerar el estudio de los proyectos» y darle «celeridad» al proceso, pero aclaró que eso no significa acompañar la media sanción que la oposición consiguió en Diputados, la cual a su entender no aporta «ninguna solución» al problema.
«Necesitamos celeridad, pero realmente me gustaría escuchar a los involucrados e involucradas en este tema, y sobre todo me gustaría escuchar a la parte más débil, que son los millones de personas que necesitan resolver su problema habitacional», expresó la senadora kirchnerista, quien aclaró que no está planteando que «pase una eternidad» de tiempo de debate «sino por lo menos un par de semanas».
A su criterio, no hay «ninguna solución» en esta media sanción que proviene de Diputados, y dijo que no está de acuerdo con haber reducido a dos años el plazo de duración de los contratos.
«No veo que vaya a solucionar ningún problema. Quiero quedarme tranquila que mi voto va a ser consecuente con lo que pienso», expresó.
Para Di Tullio, hay que dar un debate más integral sobre la emergencia habitacional, que implica poner sobre la mesa la regulación de los alquileres temporarios, y pidió hacer «legislación comparada».
A su turno, el radical riojano Julio Martínez advirtió que en la actualidad el mercado de alquileres está virtualmente «sin ley» porque no se están cerrando contratos conforme a la normativa vigente, que «no se cumple».
En tanto, apuntó contra el kirchnerismo por el supuesto plan para supeditar el tratamiento en el recinto de la reforma de Alquileres a que en la misma sesión se someta a votación los pliegos de jueces, incluyendo el de la camarista Ana María Figueroa (a quien desde Juntos por el Cambio acusan de tener afinidad con el oficialismo, y quien tiene en sus manos la decisión de enviar o no a juicio oral la causa Los Sauces/Hotesur por la que está procesada la vicepresidenta Cristina Kirchner).
«Tampoco le creo al kirchnerismo que de no haber querido tratar este tema hoy lo quieran tratar. Este Senado que está cerrado y lo denuncio porque sino somos cómplices», lanzó.
«El Senado está a la orden de Cristina Kirchner y su agenda de venganza e impunidad. Mucho me temo que a esta ley le quieren poner la condición de que en la sesión se traten los pliegos de la jueza Figueroa y los 75 jueces que quieren aprobar», conjeturó el senador de la UCR.
«Ustedes tienen que dejar de legislar para Cristina Fernández de Kirchner y pasar a legislar para la gente. Tienen que dejar de preocuparse por la impunidad de ella porque eso deja este Senado parado», siguió Martínez, quien pidió avanzar directamente con la firma de los dictámenes este mismo martes.
Por su parte, Maurice Closs (Frente de Todos) pidió evitar un trámite exprés y aseguró que «el Senado se tiene que tomar un tiempo y si hay consenso se tiene que votar una ley».
«Nos tenemos que tomar los días que haga alta, tampoco un siglo entero», aclaró el misionero.
A su turno, la senadora del PRO Guadalupe Tagliaferri acusó al oficialismo de buscar «dilatar» el tratamiento de la ley e inclusive de bloquearlo, por lo que puso en duda que el Frente de Todos busque tomarse más tiempo para estudiar el alcance de los distintos proyectos en la materia.
«Ustedes son especialistas en despachar dictámenes en dos minutos, entonces no nos vengan con el cuento de que quieren seguir debatiéndolo. No tienen ninguna intención de aprobarlo», disparó.
«No le mientan a los argentinos. Digan que no lo quieren tratar, que lo quieren dilatar», machacó la senadora.
La senadora María Inés Pilatti Vergara (Frente de Todos) pidió «parar la pelota» y analizar «unos meses» los proyectos y no convalidar una «aparente solución que en vez de mejorar las cosas las enrarece o perjudica a unos y otros».
«Proponemos parar la pelota, hacer trabajar a asesores, traer asociaciones de inquilinos y propietarios y después concluir. No decir tirar la pelota para el año que viene, sino unos meses», sugirió la chaqueña, que aseguró que «estudiando y analizando integralmente vamos a encontrar una salida más justa aunque no sean tan rápida para unos y otros».
Una de las senadoras que todavía no definió su voto y que podría inclinar la balanza para un lado o para el otro es la misionera Magdalena Solari Quintana, quien le preguntó a Zimmermann si desde Juntos por el Cambio tenían previsto incorporar modificaciones a la media sanción de Diputados.
El radical le contestó que no lo tiene previsto, habida cuenta del apremio con el que se requiere contar con un instrumento legal que de certidumbre a un mercado que se paralizó en la última semana por el paso dado en la Cámara baja.
«El tratamiento en Diputados paralizó aún más el mercado inmobiliario, por eso me sorprende que ustedes se pregunten por qué tiene que haber celeridad en el tratamiento», dijo la senadora de la UCR por Mendoza Mariana Juri, ratificando el criterio expuesto un rato antes por Zimmermann.
Seguidamente, el senador Martín Lousteau llamó a votar la media sanción a pesar de reconocer que «no es la mejor ley».
«La actual ley pretendía proteger al eslabón más débil de la cadena y lo está matando. Generó el efecto contrario al que se pretendía. La aceptación de que esto es así está en los múltiples proyectos de ley que se presentaron de todos los bloques», apuntó.
Al respecto, subrayó que «si el propietario ve que alguna de las condiciones de la ley le genera incertidumbre se lo cobra por adelantado» y «entonces el que tiene que renovar alquiler se queda en la calle».
«Si dejamos la media sanción en un limbo por una cuestión política vamos a generar un problema mucho más grande», advirtió el líder de Evolución.
El presidente de la comisión de Presupuesto, Ricardo Guerra (Frente de Todos), cuestionó el proyecto opositor porque pretende tratar a propietarios e inquilinos como si estuvieran en pie de igualdad.
«Como en todo contrato hay dos partes y una parte tiene una posición de poder frente a otra. No podemos tratar como iguales a quienes no son iguales, todo contrato debe tener un equilibrio y tener en cuenta el contexto y las posiciones de fuerza», analizó el riojano.
Por último, la vicepresidenta del interbloque del Frente de Todos, Anabel Fernández Sagasti, negó que desde el oficialismo tengan intenciones de «dormir o dilatar» el tratamiento y explicó que «lo que sucede» es que no están de acuerdo con el contenido de esa media sanción.