Como vecina de Junin, siento un profundo pesar por la manipulación que se hace de la gestión municipal, ya que no me acostumbro que reducido solo a la intervención en tiempos electorales, dejando el resto del tiempo al abandono y la desidia.

El municipio muestra un desinterés total, por las demandas de los vecinos y de las instituciones que los representan. Espacios públicos abandonados, calles sucias y descuidadas, luminarias quemadas, plazas destruidas, comercios y empresas cerradas, escuelas rotas, y todo esto con tasas altísimas que no paran de crecer año a año, para enriquecer un municipio que ahorra dinero.

Sin embargo de pronto se acerca la fecha de elecciones y de pronto, se podan las plantas que ya taparon los desagües, se pintan los cordones que ya generaron desorden, se cambian las luminarias que ya generaron inseguridad, se inauguran obras que aún no se han terminado, y todo con la cara de los candidatos, que nada tienen nada que ver con esas acciones.

Como vecinos, no sólo tenemos que esperar a tener respuestas cuando llega el proceso electoral sino que hoy además pagamos con nuestro dinero la campaña de los candidatos del intendente.

Toda mi vida he participado con orgullo y responsabilidad de distintas instituciones comprometidas en el desarrollo de mi ciudad, y en la mejora de la calidad de vida de cada vecino y vecina sin obtener de ello mas que el cariño y el reconocimiento de la gente. Hoy como vecina, me siento subestimada y usada por un Intendente que usa el municipio como una herramienta electoral, que está al servicio de sus intereses y no del conjunto de los juninenses.