Plantear la desaparición de la tasa vial ( combustible) implica un desconocimiento importante de la vida de los municipios. Este impuesto viene de la gestión anterior y tiene su origen en el abandono de los gobiernos a los municipios y la delegación de responsabilidades en cuestiones que no eran potestad de los mismos. Así ocurrió con la seguridad con la educación y el mantenimientos de caminos.
En momentos de emergencia donde se le están dando herramientas al presidente para enfrentar la crisis estructural no sería atinado poner a los intendentes a una situación de vulnerabilidad ante una mayor demanda social.
La finalidad de la tasa entre otras es poder mantener en buen estado calles y avenidas de nuestra ciudad, No es un impuesto nuevo y tiene sentido. Es fácil hablar cuando no se gobierna. El recorte de fondos y la discriminación desde la provincia impacta en nuestro distrito por eso es necesario la continuidad del tributo.
Plantear la eliminación de la tasa es ignorar la situación social que se vive