Lionel Messi anotó el 1 a 0 frente a México en el partido que terminó 2 a 0 e igualó a Diego Armando Maradona en cantidad de goles en la Copa del Mundo, con ocho cada uno.
Messi igualó la cantidad de goles de Maradona en la Copa del Mundo
El astro argentino metió un zurdazo cruzado inalcanzable para el arquero mexicano Guillermo “Memo” Ochoa, a los 18 minutos del segundo tiempo para hacer estallar a los argentinos en un partido en el que no se había generado casi ninguna situación de peligro.
Pero la coincidencia entre los dos mejores jugadores de la historia no se resume solo en la cantidad de goles, sino también en la cantidad de partidos que disputó cada uno en la cita mundialista: 21.
El debut mundialista de Lionel Messi fue a los 18 años frente a Serbia y Montenegro, en el partido donde la Selección vapuleó a los europeos por 6 a 0. En aquella ocasión ingresó desde el banco de suplentes a los 75 minutos y a los 88 cerró la goleada con una buena definición entre las piernas del arquero Dragoslav Jevric y tras una excelente entrega de Carlos Tevez.
La Pulga tuvo una fase de grupos fantástica, anotando en todos los partidos.
El primer gol de su tercer Mundial llegó en el debut frente a Bosnia, que la Selección ganó 2 a 1. Luego anotó el agónico gol de la victoria frente a Irán y ante Nigeria metió un doblete, con golazo de tiro libre incluido.
Un Mundial complicado para la Selección argentina y para Messi. En el debut tuvo un penal para anotar el 2 a 1 frente a Islandia, pero se lo atajaron y en el segundo partido el elenco nacional cayó por 3 a 0 frente a Croacia. El gol de La Pulga llegó en el tercer encuentro, otra vez ante Nigeria, con un remate cruzado tras una asistencia perfecta de Éver Banega.
El actual Mundial parecía que comenzaba a toda orquesta para la Argentina. Gol de Messi apenas empezado el partido y varias situaciones claras en el primer tiempo frente a Arabia Saudita, pero los asiáticos dieron el batacazo y se impusieron por 2 a 1.
El segundo gol de Messi en esta Copa del Mundo llegó ante México para destrabar un partido que venía complicadísimo.