Carolina «Pampita» Ardohain estrenará este miércoles por la plataforma Paramount+ la segunda temporada de «Siendo Pampita», un reality que recorre distintos aspectos de su vida, y la modelo destacó que el revival del formato que fue furor a principios del milenio se debe a que «ya no hay distancia con el público».

«Ya estamos todos los días conectados a través de las redes y hay un ida y vuelta buenísimo porque la gente siente que te tiene dentro de su casa y su corazón; hay un afecto que yo siento verdadero en el día a día en la calle», destacó la modelo sobre el programa que estrenó en 2021 y que si bien la siguió en todos los aspectos de su vida, estuvo enfocado en el tratamiento para quedar embarazada que encaró junto a su pareja, el legislador porteño de Juntos por el Cambio, Roberto García Moritán.

En ese momento, la premisa de «Pampita» para ponerle el cuerpo al proyecto fue sencilla: «Haga lo que haga sale en todos los portales al día siguiente, hasta la cosa más insólita, como si se me pincha la rueda del auto o voy al supermercado, así que nos dimos cuenta que había mucha gente que me tiene mucho cariño y quiere poder estar más cerca mío».

Así fue que después de una primera temporada cruzada por la pandemia y que abordó temáticas tan íntimas y personales como el tratamiento de fertilidad, el armado del cuarto de la beba, el parto de Ana y los primeros días con una nueva integrante en la familia ensamblada que conforma la pareja, la modelo apostó a una nueva edición de 10 capítulos para seguir mostrando su vida como madre, empresaria, esposa y amiga.

Ardohain llega a esta nueva entrega de su existencia íntima, a la vez que conduce «El hotel de los famosos» de lunes a viernes desde las 22.45 por la pantalla de eltrece.

Consultada por el vértigo de mostrar algo tan sensible como la búsqueda de un embarazo, la animadora reconoció a Télam que la reflexión de ese momento fue: «Si da resultado nos queda de recuerdo y si no da resultado es parte de la vida. Son muchas las mujeres que tienen que pasar procesos así y dije pase lo que pase emprendamos esto juntos».

«La gente quedó muy enganchada y hubo una respuesta súper linda en toda Latinoamérica y ahora querían ver cómo seguía todo con la llegada de la bebita, que nos transformó a todos. Entonces dijimos `dale, abramos un poco de vuelta la puerta´ y veamos todo».

Ahora, sin las restricciones sanitarias, la modelo promete una versión más movida del reality familiar, que incluye viajes al exterior, salidas con amigos, planes familiares, fiestas y el bautismo de Ana, entre muchas otras cosas que no se habían podido hacer en la primera edición.

Respecto a la posibilidad de una tercera temporada, la exjurado del «Bailando por un sueño» no descartó nada: «Hay muchas sorpresas, en el último capítulo de la segunda les vamos a dejar una puerta abierta».