«Me cuesta creer que esta chica Brenda sea el final de cadena de responsabilidades», aseguró el ministro de Seguridad bonaerense para referirse a una supuesta participación de «sectores que trabajan como servicios de inteligencia para diferentes personalidades y organizaciones».
Para Berni, Sabag y Uliarte pudieron haber sido «manipulados por servicios de inteligencia»
El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, deslizó este miércoles la posibilidad de que detrás del accionar de Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, detenidos por el atentado a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, haya «servicios de inteligencia» que los «manipularon» para llevar adelante el intento de magnicidio.
«Me cuesta creer que esta chica Brenda sea el final de cadena de responsabilidades», manifestó el funcionario anoche en una entrevista con TN, y aseguró que «conociendo cómo se manejan muchos servicios de inteligencia» perfiles como los de Sabag Montiel y Uliarte son buscados para incentivarlos a realizar ciertas acciones.
En el mismo sentido, Berni consideró que los acusados tienen la «personalidad perfecta» para llevar a cabo el ataque cometido contra Fernández de Kirchner, al tratarse de «gente manipulable, manejable y son dominados».
«Son mano de obra desocupada, personas manipulables que comienzan a ser trabajados psicológicamente y a la hora del atentado cuelgan el teléfono y nunca más se supo de ellos», agregó.
Respecto a quiénes podrían haber manipulado a Sabag Montiel y a Uliarte para cometer el atentado, Berni puntualizó: «Puede ser inteligencia interna, no solo tenemos que pensar en lo estatal sino en sectores que trabajan como servicios de inteligencia para diferentes personalidades y organizaciones».
Por otra parte, Berni relativizó la responsabilidad de los custodios de la vicepresidenta en el intento de magnicidio del jueves 1° de septiembre.
«Es normal que un dirigente político tenga contacto físico con la gente en un lugar abierto en Sudamérica. Lo que hay que discutir es si está bien o mal, no si la custodia actuó bien o mal, porque en un lugar público es normal que pasen estas cosas», respondió.
En otro tramo de la entrevista halagó al jefe de la custodia presidencial, Diego Carbone, al que definió como una de las personas más preparadas para ejercer el cargo.
«Lo conozco a Carbone y no tengo duda de que es de las personas más preparadas para ejercer el cargo del jefe de custodia de un mandatario, no solo desde lo técnico, también por su preparación psicológica, como su capacidad de mando y de decisión», remarcó.
Y luego insistió: «Si yo fuera ministro de Seguridad no lo sacaría a Carbone ni por casualidad, es la persona más idónea de toda la Policía Federal para manejar una custodia de este tipo».
Además, explicó que cuando Sabag Montiel saca el arma y gatilla, esa acción «dura menos de un segundo», por lo que «nadie se da cuenta de lo que pasó, nadie vio el arma, la custodia no la vio», solo quienes estaban más cerca del atacante.
Igualmente, Berni advirtió que «cuando lo retiran al agresor de la escena del atentado, la policía debió manejarse de otra manera, debió esposarlo».
Para Berni lo ocurrido con la Vicepresidenta no repercutirá en un cambio en la forma en la que los dirigentes argentinos interactúan con la gente en espacios públicos por una «cuestión cultural», y se preguntó: «¿Es lo mismo tocar al Papa que verlo en una cápsula blindada? Nosotros no somos tampoco la cultura norteamericana que el presidente cuando asume, el servicio secreto maneja su vida y no tiene contacto con la gente. Es una cultura distinta».
«Hay que discutir si queremos seguir así o si queremos que nuestros dirigentes estén en una cápsula blindada», concluyó.