Tras el despido de su entrenador, el argentino Fernando Ortiz y la presentación de un técnico interino, los propietarios del club mexicano firmaron la venta de Meza a cambio de un resarcimiento de dos millones de dólares y, si bien las negociaciones con River venían encaminadas, su arribo al país se vio interrumpido por problemas que exceden al club de Nuñez.

El ex futbolista de Independiente quedó atrapado en México por cuestiones de documentación y tiempo, a la espera de poder desprenderse completamente del club y lograr vestir la camiseta de River.

En medio de los revuelos y las críticas, los dirigentes mexicanos tomaron la decisión de no apurarse a la hora de deja ir al mediocampista, quien es uno de los jugadores más importantes del plantel.

El futbolista había tomado la decisión de jugar en el Millonario tras la propuesta realizada por Marcelo Gallardo -un contrato hasta diciembre del 2026-, la cual logró que rechazara ofertas de otros clubes como el Palmeiras, Corinthians, Gremio y un equipo árabe. A su vez, el mediocampista deseaba compartir institución con su hermano Juan Cruz, quien debutó en la reserva del club de Núñez.

Aún así, desde River se mantienen optimistas, ya que esperan que Rayados le permita viajar a Meza este martes por la tarde o, con mucha demora, a la noche, para poder realizar la revisión medica el próximo miércoles o jueves por la mañana e inscribirlo a la lista de la Copa Libertadores, la cual tiene fecha limite hasta el este viernes a las 19.00 (hora Argentina).

Como segunda opción, el Millonario deberá pagar la cláusula de rescisión de u$s 4 millones en caso de que las negociaciones no avancen.

EL PASE DE BUSTOS
Todo indicaba a que el lateral derecho Fabricio Bustos se convertiría en el nuevo refuerzo de River, pero el Inter de Porto Alegre cambió los términos de la negociación a último momento y complicó la llegada del ex Independiente al Millonario.

Si bien Bustos tenía todo acordado con el club de Núñez para firmar un contrato hasta diciembre de 2027, el conjunto brasileño accionó una cláusula de renovación automática -debido a que su contrato se vence en diciembre- por objetivos de cantidad de partidos y ahora el precio del jugador argentino aumentó.

El equipo brasileño afirma que el lateral derecho jugó una totalidad de 36 partidos de los 42 posibles en la actual temporada, dando un porcentaje, aproximado, del 86% y la cláusula de renovación se activa con el 60% de los encuentros disputados.

Por otro lado, el club de Núñez mantiene la esperanza de que, si el futbolista decide no jugar los 19 encuentros restantes, el porcentaje quede en un 59% e Inter de Porto Alegre no tenga la posibilidad de accionar la cláusula de renovación automática.

Por esto, para volver a negociar por el pase de Bustos, River deberá presentar una oferta concreta por el ex Independiente. Aun así, el club brasileño espera una suma de siete millones de dólares, y desde Núñez, solo pretenden pagar cuatro.