Eugenio Raúl Zaffaroni cuestionó este sábado a la Corte Suprema al asegurar que «funciona con una arbitrariedad de hace cien años», por lo que insistió con el pedido de reforma judicial, especialmente en lo que hace a ampliar el número de miembros del tribunal superior.
Zaffaroni: «La Corte funciona con una arbitrariedad de hace cien años»
El exministro del máximo tribunal consideró «importantísimo que la gente tome conciencia de que el viejo papel que antes, en los golpes de Estado, asumían los militares en otra época, hoy lo asumen los poderes judiciales».
«Nuestro Poder Judicial tiene gravísimas fallas institucionales, que dentro del contexto de nuestra Constitución se pueden corregir. No es tirar para un lado y otro. Es que tenemos un Poder Judicial con una estructura irracional”, aseguró.
Y sobre el pedido de reforma, aclaró: “Tenemos la Corte más chica de todo el continente y de Europa. Hay que aumentar el número a 24 y sería conveniente tener un ministro por cada provincia. Además de aumentar el número, hay otros dos problemas: no tenemos casación nacional y la jurisprudencia constitucional de nuestra Corte no es obligatoria», dijo.
Para Zaffaroni, la Corte «está funcionando hoy con una arbitrariedad que se inventó hace cien años. Se ha atribuido a sí misma ser la última instancia de cualquier causa y, si no, decir ‘no me interesa’». Y añadió: «Ahora la Corte manoteó el Consejo de la Magistratura. ¿A qué estamos jugando?»
En diálogo con radio La 990, señaló que «vivimos en la Argentina una situación de tardo colonialismo, de colonialismo que no se ejerce de la misma manera que en las etapas anteriores: es a través del endeudamiento que nos somete a órganos transnacionales”.
El ex ministro de la Corte sostuvo que “la concentración de riqueza provoca una sociedad 30/70 y de alguna manera hay que contener al 70% de excluidos. ¿Cómo contenés ese 70%? Con una creación de realidad falsa, a través de los medios de comunicación”.
En ese sentido, Zaffaroni dijo que “creer que los monopolios y oligopolios de medios de comunicación son por azar, no lo son. Vivimos situaciones que son análogas a Hitler o Stalin, con tecnología actual… El contenido de los once principios de Goebbels se mantienen», enfatizó.
«Los monopolios de medios asumen la función de partidos políticos. La forma de evitar la ‘paciencia del cuchillo’ es una lucha que le dé eficacia a los derechos humanos, y conserve ese discurso como discurso de liberación de los pueblos. Hay quienes intentan degradarlo a un mero discurso de dominación», concluyó.